Desde las elecciones los partidos españoles se han embarcado, sin muy buenos resultados, en la difícil tarea de generar coaliciones para formar gobierno. Es en este contexto que Podemos puso varias condiciones a los socialistas para conseguir su apoyo.
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Ante los empresarios reunidos por el Círculo de Economía en Sitges (Barcelona), el presidente de Podemos, Pablo Iglesias, fue categórico y puso como demanda para formar gobierno con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) la disminución de 40 horas semanales a una «semana laboral de 34 horas sin reducción salarial».
Entre sus requerimientos también están el aumento de los impuestos a los más acaudalados, al patrimonio y a la banca; derogar la reforma laboral del 2012 para crear contratos indefinidos y una «ley de suficiencia de ingresos» con un mínimo garantizado de 600 euros (475.256 pesos chilenos) al mes.
Además, mencionó las 24 semanas de permiso de maternidad y paternidad, la creación de un banco público para inversiones de innovación y terminar con la precarización laboral. La mayoría de las demandas son parte de las promesas estelares de campaña de Podemos.
«Creo que ya es hora de que la voluntad política de los ciudadanos se vea reflejada en un Gobierno de coalición», indicó Iglesias junto con asegurar que «lo fundamental es un programa de gobierno de derechos sociales».
En España la elección de presidente se realizad de forma indirecta, la ciudadanía vota por diputados, si un partido no consigue la mayoría clave de 176 escaños debe hacer coaliciones para conseguirla. Después el rey propone un candidato y este debe recibir el apoyo del Congreso para ser investido.
Tras los comicios del 28 de abril, el tablero político cambió tras décadas en las que el PSOE y el conservador Partido Popular se alternaban en el poder. Hoy, el PSOE de centro izquierda salió ganador de las elecciones con el 29% de los votos, pero no le alcanza para formar gobierno tranquilamente y debe negociar el apoyo de partidos más pequeños para poder gobernar.
