Las persecusiones a los periodistas, los montajes policiales su contra y la poca libertad de prensa que existe en los medios es algo que se ha intensificado en Rusia en estos años. A pesar de todo, los ciudadanos no se han quedado callados y se han manifestado en contra de las autoridades por el reciente montaje contra el periodista de investigación Ivan Golunov (36).
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La ola de indignación se ha generado por el caso de Golunov, un periodista de investigación que ha destapado escándalos de fraude y corrupción que vinculan al alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, cercano al presidente ruso, Vladimir Putin. El jueves pasado el profesional fue detenido por tráfico de drogas y posteriormente liberado por ausencia de pruebas.
El Ministerio del Interior de Rusia había difundido en las redes sociales fotos que vinculaban al comunicador con las drogas, se mostraban bolsas y artilugios artesanales para fabricar mefedrona (una droga sintética) y cocaína encontrada supuestamente en su domicilio.
Sin embargo, descubrieron que al menos ocho de las nueve imágenes que incriminaban a Golunov eran falsas y fueron borradas, por lo que la policía vinculada al caso fue suspendida.
“Golonuv libre”, “Somos Ivan Golonuv”, “Soy Golunov, arréstame también a mí”, “Iván Golunov, lubre, fuera fascistas” son alguna de las frases de las camisetas que llevaban puestas los manifestantes y se calcula que más de 400 personas fueron detenidos sólo por llevar la consigna en apoyo al periodista, según OVD info, una organización especializada en el tema.
No obstante, las
Entre los arrestados se encuentran comunicadores reconocidos en la prensa nacional como Veronika Kutsyllo, Vitaly Petleva, Evgeny Snegov, Anna Narinskaya, Tatiana Malkina y el político opositor y fundador del partido “Rusia del Futuro”, Alexey Navalny y quien ha sido encarcelado en varias ocasiones.
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Montajes
Un reciente estudio del investigador de la Universidad Europea de San Petersburgo, Alexéi Knorre, estima que se han falsificado 40 mil casos vinculados con drogas en Rusia y en los últimos años al menos ocho periodistas han sido detenidos por tráfico al igual que Golunov.
En 2016, Zalaudi Geriyev quien cubrió el Cáucaso ruso (una de las zonas más conflictivas del país), fue declarado culpable por posesión de drogas. Tras tres años de prisión Geriyev pudo salir en libertad.
Es común ver cómo los periodistas, quienes son las voces que destapan casos de corrupción, son callados y detenidos por acusaciones que en su mayoría terminan siendo falsas. Son muchos los ciudadanos y activistas que quieren abrir un debate sobre la libertad de prensa y los cientos de casos falsificados por la policía.