El alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, siempre se ha destacado por presentar ideas creativas para su comuna. Y algunas han sido calificadas de extravagantes. Esta es una de ellas. El martes recién pasado el edil señaló en el matinal «Mucho Gusto» de Mega que crearía una «brigada encubierta» en la que participarán menores de edad. ¿La misión? Funcionar como soplones de la irregularidad.
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Los menores tendrán que ir a las botillerías y hacerse pasar por clientes. «Van a intentar comprar y va a quedar grabado el procedimiento», señaló Lavín en el programa de Mega. «Lo que quiero es que no le vendan, pero quiero que si le venden tener la prueba. Porque esa prueba me va a permitir clausurarle la patente de alcohol», agregó el alcalde de Las Condes.
¿Trabajo de menores?
El problema, es que estaríamos ante trabajo de menores, lo que solo podría hacerse efectivo con la autorización notarial de sus padres. La defensora de la niñez, Patricia Muñoz, conversó sobre el tema en entrevista con «El Mercurio». «Hay un tema de seguridad, que implica cómo se va a brindar protección a los niños en esta idea del alcalde», afirmó la abogada a dicho medio.
Cabe señalar que según la legislación chilena los jóvenes entre 15 y 18 años pueden desarrollar sólo trabajos ligeros que no perjudiquen su salud y desarrollo, bajo autorización expresa del padre o madre. En caso de ausencia de los padres, la autorización debe prestarla el abuelo o abuela (materno o paterno) o los guardadores, personas o instituciones que hayan tomado a su cargo al menor. Dicho trabajo no puede entorpecer su proceso de estudios.