El ministro de Justicia y ex juez de Lava Jato Sergio Moro acudió al Senado de Brasil a explicar las polémicas conversaciones difundidos The Intercept en las que presuntamente orientó a los fiscales como operar en el caso.
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Ante la Comisión de Constitución y Justicia (CCJ) del Senado el ministro se defendió, aseguró que no tiene nada que esconder, que las conversaciones entre jueces, fiscales y abogados durante el proceso son normales en la tradición jurídica brasileña e indicó que los diálogos «pudieron haber sido alterados».
«Evidentemente no tengo nada que esconder, la idea fue venir aquí espontáneamente a aclarar todo en torno a ese sensacionalismo que se está creando sobre esas noticias», indicó ante la Cámara Alta según G1.
Moro aseguró que no recuerda íntegramente los mensajes que envió hace dos o tres años y que las transcripciones pueden tener palabras que el no haya dicho y que no tiene como confirmar la autenticidad.
«Lo que veo allí, en los mensajes que se han divulgado, tienen algunas cosas que eventualmente puedo haber dicho. Tienen algunas cosas que me causan extrañeza. Pero el hecho es que aunque tenga algo verdadero, esos mensajes pueden ser total o parcialmente adulterados, a veces incluso con cambio de trecho o cambio de palabra para caracterizar una situación de escándalo que en el fondo es inexistente», sentenció.
De la misma manera, el ministro acusó «una invasión criminal, por un grupo organizado, que tiene por objetivo o invalidar la investigación por lavado de dinero y corrupción, o desestabilizar investigaciones que todavía están en marcha».
«En la tradición jurídica brasileña no es inusual que juez converse con el abogado, que juegue con promotor. Esto sucede en todo momento», añadió.
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El ex juez denunció que el 4 de junio su celular fue víctima de un ataque e inmediatamente traspasado a la Policía Federal para que investigue el caso.
Los diálogos
El sitio The Intercept publicópresuntos chats entre Moro y el exfiscal Carlos Dos Santos Lima, en los que el actual ministro del presidente Jair Bolsonaro le sugiere al procurador que adopte una estrategia en un proceso por corrupción contra el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que el propio Moro juzgaba.
Según el sitio web, la conversación es un indicio de que Moro actuaba “como un coordinador informal de la acusación” en el proceso del Triplex de Guarujá, una causa en la que la justicia encontró a Lula culpable de recibir un apartamento como pago de una coima de una empresa constructora.
Moro, según el sitio, sugiere a los fiscales que emitan una nota pública resaltando las contradicciones de Lula durante una declaración. En una supuesta segunda conversación, esta vez entre miembros de la fuerza especial a cargo de la pesquisa Autolavado, se comparten mensajes con las indicaciones sugeridas por Moro para perjudicar la defensa de Lula en el caso.
