Cuando está por comenzar la carrera presidencial estadounidense, con uno de los primeros debates de los candidatos demócratas a las elecciones del 2020; más de 70 grupos médicos y de salud pública se unieron para promover una serie de compromisos, con la finalidad de combatir el cambio climático, al que catalogaron como una “emergencia de salud”.
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La Asociación Médica de Estados Unidos, junto a la Asociación de Cardiología de Estados Unidos y otras agrupaciones, presentaron una nueva agenda contra el cambio climático, en medio de la disputa entre los candidatos demócratas sobre quién tiene la plataforma ambiental más progresista. Las recomendaciones políticas de las organizaciones de salud, si bien contrastan con la postura del presidente Donald Trump, también representan un volver a lo básico en el debate climático demócrata, que hasta el momento ha girado en torno a los preceptos liberales del nuevo pacto verde.
En la nueva agenda climática presentada por los grupos médicos y de salud pública, dieron cuenta que: “la salud, seguridad y bienestar de millones de personas en Estados Unidos ya ha sido perjudicado por el cambio climático provocado por el hombre, y los riesgos de salud en el futuro son graves si no se toma acción urgente en el combate al cambio climático”.
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Además, estas agrupaciones hicieron un llamado a los funcionarios electos y candidatos presidenciales a “cumplir y fortalecer los compromisos estadounidenses” delineados en el acuerdo climático de Naciones Unidas de 2015, del que por cierto Trump ha prometido retirarse. También buscan hacer presión por algún tipo de precio al carbono, aunque sin hacer referencia alguna de un posible gravamen a las emisiones y “un plan y un plazo para la reducción de extracción de combustibles fósiles en Estados Unidos”.