«Hay una situación especial en nuestras fronteras del norte y lo que quiero decirle a todos los chilenos como Presidente es que estamos defendiendo una causa que es justa y que es noble: que las personas que entren a Chile entren diciendo la verdad y respetando nuestra legislación».
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De esta manera, el Presidente Sebastián Piñera, se refirió por primera vez de la crisis por los venezolanos varados en el paso fronterizo de Chacalluta, en el límite de Perú con nuetsro país.
Tras la sesión inaugural de la cumbre del G20 en la ciudad japonesa de Osaka, el Mandatario insistió que «tenemos la puertas abiertas —añadió— a quienes vienen cumpliendo nuestras leyes, sin engañar a nuestras autoridades, a integrarse a nuestro país, a trabajar en forma honesta, pero no queremos que ingresen a nuestro a aquellos que causan daños».
El complejo fronterizo Chacalluta, tiene un paso de 5000 mil personas por día, convirtiéndolo en el más transitado de Chile y en la actualidad tiene a cerca de 300 venezolanos sin poder ingresar a Chile o Perú.
Las autoridades locales han manifestado su preocupación y temen que empeore. Gonzalo Espíndola, alcalde de Arica señaló hace un par de días que “según lo que hemos podido conversar con ONG de migrantes, en julio el número de personas intentando ingresar al país podría crecer de manera exponencial. Hoy en día solo un 7% de todos los migrantes que llegan a Chacalluta están pudiendo ingresar. Nos preocupa que se pueda convertir en un campo de refugiados”, relata el alcalde a Publimetro.
