La canciller alemana Angela Merkel descartó el viernes que haya motivos para preocuparse por su salud cuando dijo que tenía un interés personal por estar saludable y tener una vida después de la política.
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Merkel dijo que comprende las preguntas relacionadas con su salud tras los tres incidentes recientes en donde su cuerpo tembló mientras estaba parada en eventos públicos, pero aseguró que está al tanto de su responsabilidad como canciller y “puedo ejercer esta función”. Agregó que no había motivos para preocuparse.
Merkel, quien esta semana cumplió 65 años, recordó que ya descartó buscar un quinto periodo como canciller.
“Ya he dicho que 2021 será el final de mi carrera política y espero que haya una vida después de eso, y me gustaría vivirla con buena salud”, agregó.
Sucesión
Merkel todavía disfruta de sólidos números de popularidad, pero últimamente el desempeño de su partido en las elecciones no ha sido el mejor y no está claro quién será el candidato de su partido para sucederla como canciller, un puesto que ella ocupa desde 2005.
El año pasado, entregó el liderato de su partido de centroderecha Unión Demócrata Cristiana. El puesto lo ganó la aliada de Merkel, Annegret Kramp-Karrenbauer, quien ha batallado para establecer su autoridad y esta semana ingresó al gabinete de Merkel como ministra de Defensa, una medida que muchos han interpretado como un intento para fortalecer su derecho al puesto principal.
“No ejerzo ninguna influencia para mi sucesión. El partido tendrá que decidir eso en el futuro”, dijo Merkel. “Pero Annegret Kramp-Karrenbauer es la líder del partido y claro que está en una posición importante y decisiva”.
