Si usted no lo sabe, le contamos que glaciar es una gran masa de hielo que se va formando con el paso del tiempo debido a la acumulación y a la compactación de la nieve, que se va endureciendo.
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Islandia, el país de la cantante Björk, una inhóspita isla descubierta por los vikingos alrededor de siglo IX, hasta hace poco tenía más de 400 glaciares, pero debido al cambio climático la masa de éstos se ha reducido en promedio un siete por ciento.
Una imagen satelital difundida por la NASA da cuenta de la gradual desaparición del enorme glaciar Okjökull (llamado por cariño Ok), que en las últimas tres décadas se fue reduciendo hasta ahora que fue declarado muerto, difunto, occiso, finado.
Un mapa geológico de 1901 estima que el Ok abarcaba un área de unos 38 kilómetros cuadrados. En 1978 imágenes aéreas mostraron que el glaciar medía tres kilómetros cuadrados, mientras que hoy mide menos de un kilómetro cuadrado.
El 2014 la comunidad científica declaró al glaciar oficialmente muerto, y ahora un grupo de antropólogos de Islandia destacará su fallecimiento con una placa para crear conciencia del daño que el ser humano ha causado en la naturaleza.
«El Ok es el primer glaciar islandés que perdió su estatus de glaciar. En los próximos 200 años se espera que todos nuestros glaciares sigan el mismo camino”, dice la plaquita que se instalará desde el próximo domingo en el lugar que alguna vez estuvo cubierto de hielos, supuestamente eternos.
«Con este monumento reconocemos que sabemos lo que está sucediendo y lo que hay que hacer. Sólo en el futuro se sabrá si lo conseguimos”, continúa el mensaje de la placa.
Ante intervenciones de este tipo, los chilenos debemos preguntarnos si debemos poner una placa en el lugar donde antes estaba la Laguna Aculeo, o en tantos otros sitios que ya no son lo que alguna vez fueron.
