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En Chile hay impacto por la investigación del Vaticano sobre una acusación de abuso sexual cometida por el obispo Bernardino Piñera, tío de nuestro presidente. Una noticia que dio la vuelta al mundo, como la resolución de la Justicia australiana de rechazar la apelación del cardenal George Pell, que está preso desde febrero.
El religioso de 78 años, que llegó a ser la tercera autoridad jerárquica del Vaticano, y estuvo a cargo de sus finanzas, deberá pasar seis años en la cárcel por cinco cargos de abuso de menores, incluido uno de penetración oral, cometidos contra dos niños del coro de la catedral de Melbourne entre 1996 y 1997.
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La presidenta del Tribunal Supremo de Victoria, Anne Ferguson, dijo al inicio de la lectura del fallo que dos de los tres jueces desestimaron la apelación presentada por la defensa del cardenal.
El abogado del depravado argumentó que de las víctimas abusadas sólo una estaba con vida, y que la condena no podía basarse en el testimonio de una persona.
La jueza Ferguson no consideró ese argumento. «El juez Maxwell y yo aceptamos la presentación de la acusación que argumentaba que el demandante era un testigo convincente, que claramente no mentía ni fantaseaba y que era un testigo de la verdad», dijo en la lectura del fallo.
