En tiempos donde la sequía, el cambio climático y el calentamiento global se toman la agenda, cada vez son más los espacios donde se cuestiona el buen uso de los recursos o la huella de carbono que deja. Eso quedó en evidencia en la encuesta Parrilleros 2019, realizada por la Cadem, y donde demostró que los efectos de la industria ganadera ya no son desconocidos por los chilenos.
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Según el sondeo, que utilizó a unas 2 mil personas como muestra, al menos el 50% de los chilenos considera que la ganadería impacta «bastante» en el cambio climático. Además, el 26% dice que influye en «algo», mientras que el 10 considera que la industria de la carne es «determinante» en el calentamiento global. Estas cifras se incluyen por primera vez al sondeo, que se realiza año a año para la época dieciochera.
El estudio de la Cadem, hecho en conjunto con Meat Me, concluye que el 83% de las personas cambiaría su compra de carne si es producida de un modo más amigable con el medio ambiente, aún cuando eso implique pagar más.
Pero como el sondeo es además una radiografía al parrillero criollo, el sondeo estimó que el 78% de los hogares tiene parrilla, y ésta es en un 81% a base de carbón, un 12% son eléctricas y un 7% a gas.
Junto a eso, el 48% de las personas realiza o participa de un asado cada 30 días, prefiere los días sábado (50%) y un grupo no menor (41%) se considera un «experto» para los asados. En esa línea, un 52% declara ser «encargado» de los asados, siendo un 75% hombres y un 29% mujeres.
