El Juzgado de Familia de Los Ángeles resolvió mantener una medida cautelar en favor de una recién nacida en el Hospital Víctor Ríos Ruiz de esa comuna, luego de que diera positivo por drogas en un test de orina.
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El tribunal fue informado que una mujer con 31 semanas de embarazo no se realizaba sus controles periódicos, tenía una situación problemática de consumo de pasta base y contaba con diversos antecedentes penales.
Ante tal situación, se determinó su hospitalización forzosa y resguardo de Carabineros -ante riesgo de fuga- para que el parto se efectuara en las mejoras condiciones posibles.
Real estado
Tras nacer la niña, se determinó retener su alta médica y mantenerla internada en el recinto hasta la audiencia preparatoria de mediados de octubre.
No obstante, ante los nuevos antecedentes entregados por el recinto de salud angelino, el magistrado presidente del tribunal, Cristián Pacheco Pino, determinó mantener la medida cautelar para la lactante hasta que los profesionales de salud informen el real estado en que se encuentra, dejando sin efecto la internación forzosa y el resguardo policial para la madre.
«Hay que resaltar que los juzgados de Familia tienen la obligación por ley de resguardar los derechos de niños, niñas y adolescentes por lo que hemos obrado en ese sentido, a la espera que se nos entregue desde el hospital información científica de la real condición de salud de esta niña», afirmó el juez Cristián Pacheco.
