Es el «corazón» de la reforma tributaria, pero luego del estallido de la crisis social, concita cada vez menos apoyo. Pese a ello, el nuevo jefe de la billetera fiscal intentará defenderlo.
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El nuevo ministro de Hacienda, Ignacio Briones, afirmó este lunes que la reintegración tributaria «es una idea que yo no la voy a dejar, no la voy a botar a la basura».
Cabe recordar que este elemento es defendido por el Gobierno y algunos expertos para atraer más inversión, pero sus críticos apunta a que implica una rebaja de impuestos a los más ricos.
En entrevista con radio Cooperativa, el secretario de Estado anunció que «yo pretendo juntarme con la oposición en los próximos días, precisamente para entender en qué punto estamos, yo espero que podamos llegar a un acuerdo», en referencia a esa parte de la iniciativa.
A juicio del economista, «hay que entender que es cierto que la reintegración, en términos de su costo fiscal, aproximadamente un cuarto de ella iba al 1 por ciento más rico, de mayores ingresos del país, pero la reintegración no es tan significativa en términos de su impacto».
«Sí es sustantivamente más relevante en términos de su efecto en lo que llamamos la equidad horizontal, es decir, que dos personas que paguen lo mismo ganen lo mismo», dijo.
«Esa es una idea que yo no la voy a dejar, no la voy a botar a la basura, la voy a poner sobre la mesa, pero estando dispuesto a entender la postura de los senadores de oposición», advirtió el ministro.
