«La actual contingencia que enfrenta Chile exige cambiar nuestra agenda como gobierno para concentrarnos en los cambios que enfrenta la ciudadanía», dijo el titular de Relaciones Exteriores, Teodoro Ribera.
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El canciller explicó que ambos eventos internacionales fueron compromisos previamente adquiridos por Chile y ratificó las palabras del Presidente al decir que fue una «decisión muy difícil, pero pensando en todos los chilenos».
Además, detalló que se reunieron con los embajadores de los países miembros dela APEC para comunicarles la decisión, que aseguran fue recibida con agradecimiento por «el esfuerzo de Cancillería durante una año».
En ese sentido, explicó que «seguirán trabajando en la defensa de los intereses del país y en generar mejores oportunidades en beneficio de los chilenos».
La visión del ministro fue compartida por su par, Carolina Schmidt, quien se refirió a la decisión como un «momento triste», pero asegura que fue una «responsable, necesaria en los momentos que estamos viviendo como país».
Además, la ministra agradeció el trabajo y compromiso de «miles de personas a lo largo de todo Chile», ONGS, actores internacionales, entre otros. «Entiendo que todos ellos, al igual que el Gobierno, siente profunda tristeza» por no poder realizarse la COP25.
«La ciudadanía ha manifestado demandas contundentes que requieren atención de parte del Gobierno», manifestó.
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Schmidt, señaló que por los momentos se enfocarán en «trabajar con fuerza» en los cambios que se necesitan.
«El foco está en nuestro país, pero tenemos que restablecer la cohesión social que necesitamos e impulsar las demandas de las ciudadanía», enfatizó.
Por último, la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, aseguró que aquellos recursos que no fueron utilizados por la organización de la COP25 se «se van a devolver».