Definitivamente el actuar de Carabineros durante los primeros auxilios tras el paro cardiorrespiratorio que sufrió un joven de 29 años, identificado como Abel Acuña, durante las manifestaciones del viernes pasado.
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Mientras voluntarios y personal del SAMU realizaban los primeros auxilios, carabineros lanzaron lacrimógenas, chorro de agua y perdigones al lugar donde se encontraba la víctima y la ambulancia, a pesar de los respectivos distintivos que utilizan personal de emergencias. Inclusive, una funcionaria del SAMU recibió un impacto de perdigón durante la emergencia.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) presentará una querella por «homicidio por interrupción de acción de salvamiento» debido a que producto de la acción policial fue “imposible iniciar soporte inicial avanzado”.
“Lo anterior puesto que la policía tiene la posición de garante por ley y tiene la obligación de resguardar a manifestantes y a personal médico que se encuentra realizando sus labores”, indican desde el INDH.
Añaden que «en este caso, no sólo no habría hecho lo anterior, sino que habría ejercido violencia en contra del personal médico y sin esas acciones, de acuerdo al propio relato del personal del SAMU ‘podría haber mejorado el pronóstico vital de la víctima'».
“Se trata de un hecho de extrema gravedad, de acuerdo al derecho internacional de los derechos humanos y el derecho humanitario, que exige que se facilite y se otorgue seguridad al personal médico para atender a las personas heridas», indicó el director del INDH, Sergio Micco.
De la misma manera, Micco aseguró que «no estamos frente a un hecho aislado».
«El INDH ya ha presentado cinco querellas en contra de carabineros por agresiones al personal de primero auxilios en el contexto de las manifestaciones, y este sexto caso resulta inaceptable”, puntualizó.
