Más de 50.000 personas en el este de Texas seguían bajo una orden de desalojo obligatoria mientras sigue activo un incendio en una planta química, un día después de registrarse dos enormes explosiones en el lugar.
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Las explosiones, con 13 horas de diferencia, rompieron las ventanas y puertas de las casas en las inmediaciones y provocaron una orden de desalojo en un radio de 7 kilómetros de la planta en Port Neches en el sureste de Texas, a unos 129 kilómetros de Houston.
El capitán de bomberos de Port Neches dijo el jueves que las llamas todavía arden y que sigue vigente la orden de desalojo, que afecta a 50.000 personas, reportó la televisora KBMT.
La explosión inicial en la planta TPC Group, que fabrica productos basados en químicos y petróleo, ocurrió alrededor de la 1 de la madruga, cubrió un área de varios kilómetros de humo negro y provocó el incendio.
La segunda explosión fue alrededor de las 2 de la tarde y lanzó al aire un reactor de acero. Eso provocó que el juez del condado Jefferson, Jeff Branick, el principal funcionario local, ordenara el desalojo de Port Neches y los cercanos Groves, Nederland y parte de Port Arthur.
En conferencia de prensa la noche del miércoles, Branick dijo que la falta de electricidad en la planta no permitió que se investigara la causa de las explosiones o cuánto daño había sufrido la instalación. Por lo mismo, agregó, se desconoce la extensión del daño en los barrios circundantes.
Los tres trabajadores que resultaron lesionados durante la explosión _dos empleados de TPC y un contratista_ fueron atendidos en hospitales y dados de alta, dijo Troy Monk, el director de salud y seguridad de TPC. Los aproximadamente 30 empleados que estaban en la planta cuando fue la explosión ya han sido localizados, según TPC.