Desde el más mínimo detalle de la historia, al más mínimo trazo de sus dibujos, «Code Vein» es un juego que por su arte atrapa de inmediato a los fanáticos del animé. Es muy común que los fanáticos de los videojuegos se sientan atraídos por la animación también (al menos a mi me pasa).
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«Code Vein» logra una mezcla bastante buena de ambos mundos, siendo una historia original. Disponible para PC, Playstation 4 y Xbox One, probamos la versión de PS4 y estas fueron las impresiones. Hay que señalar que, en su modo de juego, es como un «Dark Souls» y de hecho, así fue anunciado.
¿Por qué tanta expectativa? Porque su lanzamiento sufrió algunos atrasos. Pero además, su historia nos habla de un escenario post apocalíptico, una elección que últimamente es bastante exitosa.
La historia, el juego, el encanto
En «Code Vein» el mundo ha sido arrasado por una terrible plaga y la población se divide principalmente entre apariciones y perdidos. Los últimos son los monstruos a los que tendrás que enfrentarte, mientras que los primeros son esta especie de vampiros con máscaras de gas, entre ellos tú.
Esta especie busca sobrevivir en un mundo hostil. Todo en este universo se mide a partir de la sangre. Eso sin duda le da un toque único. Podrás personalizar bastante. Ropa, peinados, complexión, etc.
Animé y batalla
Muchos han señalado que este juego es una suerte de «heredero de Dark Souls», el motivo es su modo de combate: es lo mejor. Al principio puede ser algo complejo, pero se vuelve más fácil con práctica. A lo largo de tu aventura te encontrarás con diferentes acompañantes, que a su vez poseen distintas habilidades que te ayudarán a abrirte camino hacia tus objetivos.
No te adelantaremos mucho más, pero la inteligencia artificial de ellos, es bastante útil, sobre todo cuando estés recogiendo materiales o cargando un ataque. hacen un buen back up. La historia atrapa, las batallas son entretenidas y dinámicas.
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Todo en su justa medida
Para clasificar este juego cabe señalar que es una mezcla equilibrada entre el mundo del animé y las batallas. Comparto la opinión de otros analistas: es un juego estilo Dark Souls. Los jefes son dignos, ni muy fáciles ni imposibles. La personalización es genial. Y la historia, podría ser perfectamente un guión de animé.
Un título más que recomendado. Sus armas imponentes, ese estilo entre gótico, estilos y del mundo del animé. La sangre destacada entre colores oscuros. El arte del videojuego sin duda atrapa.
