Uno de los símbolos de la actividad cultural de Santiago, Cine Arte Alameda (Alameda 139), se consumió por las llamas, informó el Cuerpo de Bomberos de la capital.
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Los Bomberos activaron la «cuarta alarma» dada la gravedad de la situación. Manifestantes se encontraban en los alrededores e incluso ayudaron a los bomberos para el combate a las llamas.
«El techo de acrílico se vino abajo y hubo pérdida total en el recinto. No puedo asegurar que el punto de ignición lo haya generado una bomba lacrimógena», expresó el segundo comandante del Cuerpo de Bomberos de Santiago, Diego Velásquez.
Un total de 10 compañías de bomberos trabajaron trabajando en el lugar, e incluso detectaron una fuga de gas.
Las columnas de humo se pudieron divisar en toda la capital.
Más temprano
Fuerte presencia de Carabineros de Chile, con actuación de Fuerzas Especiales, se percibe a esta hora en los alrededores de Plaza Italia, rebautizada como Plaza de la Dignidad, en el marco de las protestas que se vienen llevando todos los viernes desde el 18 de octubre.
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Chorros de agua, lanzamiento de bombas lacrimógenas y severos controles de identidad, se contraponen a la música de los artistas callejeros y la intención de los manifestantes de difundir sus consignas de manera pacífica.
El tránsito se encuentra cortado, desde la GAM hacia el oriente de la ciudad, sitio desde donde los manifestantes intentan desplazarse hacia la plazoleta del General Baquedano, así como también desde el Parque Bustamante.
Pese a las altas temperaturas de la ola de calor, los manifestantes persisten en su intención de copar el lugar, tomado desde tempranas horas de la tarde por las fuerzas de seguridad.
A las 6.15 pm, los manifestantes lograron avanzar hasta la plazoleta del General Baquedano, con banderas y cánticos, mientras Carabineros se retiraba hacia los predios de la Torre Telefónica.
A las 7.00, una multitud pudo copar la rotunda del General Baquedano, así como las calles adyacentes.
A las 9.00 pm, la multitud creció de manera exponencial y manifestantes portaban una pancarta que rezaba «Sólo luchando avanzamos».
A las 10.50, la multitud se dispersó sin contratiempos.
