El príncipe George, de seis años, y su hermana menor, la princesa Charlotte, de cuatro, estuvieron separados por un breve tiempo de sus padres, el príncipe William y Kate, duquesa de Cambridge. A principios de este mes, la familia Cambridge asistió al almuerzo de Navidad de la Reina.
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El almuerzo es una tradición que la monarca organiza cada año antes de ir a Sandringham para su descanso festivo. Invita a miembros de su familia extendida al Palacio de Buckingham y el evento suele ser un asunto muy privado.
Este año, sin embargo, Mike, el esposo de la nieta de la Reina, Zara Tindall, comentó algunas cosas sobre el lujoso almuerzo. Reveló detalles del día especial en el podcast House of Rugby de JOE UK.
Contó cómo los niños, incluidos George y Charlotte, fueron colocados en una mesa separada en una habitación separada durante el almuerzo.
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Él dijo: «En realidad no bebí. En el almuerzo familiar debe haber alrededor de 70 personas allí, hay siete mesas y los niños tienen su propia mesa en una habitación diferente. Estaba en la mesa del Príncipe Carlos. Fue encantador, realmente bueno”.
En diciembre de 2018, Mike dio otra rara visión de las festividades de la realeza.
Apareciendo en el podcast de House of Rugby, le preguntaron si la Navidad es buena en el castillo. Mike dijo: «Sí, es bueno. Así que el día de Navidad es un poco más tranquilo porque en realidad es un buffet frío porque les da a todos el día libre, y su gran día es la víspera de Navidad».
También explicó que la familia se sienta a mirar el discurso de la Reina «con un vaso de algo».