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La seguridad es un tema clave en el hogar y en locales comerciales. Distintos avances se han hecho en esta área considerando, por ejemplo, cámaras y sensores de movimiento. Pero también se puede mejorar la estructura existente, como los ventanales.
Hay que entender que existen distintos tipos de vidrios, los cuales se diferencian básicamente en la forma en la que se quiebran y en la resistencia que tienen. Por esto es de suma importancia que los cristales que se utilizan para construcciones sean vidrios de seguridad preparados para todo evento. Esto evitará que, si se llegasen a quebrar, salgan disparados en trozos que podrían dañar a las personas como verdaderas guillotinas.
Nueva tecnología: no se quiebra en mil pedazos
Dentro de las novedades en el mundo del vidrio, llegó a Chile un vidrio de seguridad especial para evitar quiebres por robos o saqueos, el cual tiene una resistencia mucho mayor que un vidrio normal. La principal preocupación es cuidar las personas y estructuras sin tener que contar con espacios tapados con madera o fierros por seguridad.
Pese a que este vidrio exterior puede ser quebrado ante sucesivos golpes, la membrana plástica que está entremedio de ambos vidrios, es muy resistente y no será fácil lograr traspasarla. Adicionalmente los dos paneles de vidrio que la conforman quedan perfectamente adheridos a este polímero siendo un vidrio que no tiene peligro para las personas que se puedan encontrar cerca al momento del quiebre.
Seguridad y norma
Conversamos com Gonzalo Acevedo, representante y especialista de Vidrios Lirquén, quien explicó{o que “este es un vidrio de 12mm de espesor total que tiene una membrana plástica transparente de 1,5mm de espesor en su interior. Esta composición hace que sea muy difícil el ingreso a través de este vidrio al intentar quebrarlo». «Está pensado principalmente para cubrir aberturas de construcciones que estén en lugares de acceso público, como bancos, farmacias y vitrinas comerciales en general, para cuidar la seguridad de sus trabajadores y clientes”, agregó.
Sin embargo, Acevedo añade que hoy más que nunca en Chile debe existir la legislación que obligue a utilizar cristales de seguridad (templados o laminados) que se comporten de una manera diferente cuando se rompan, ya sea quedando los pedazos fijos en el marco por una lámina interna o desgranándose en partículas inofensivas. Aunque lo que sí tenemos es la normativa vigente (NCh 135), que regula el uso de vidrio en arquitectura, donde se identifican las llamadas “zonas de riesgo”, las cuales deberían usar siempre vidrio de seguridad para evitar accidentes.