María José Zaldívar fue una de las piezas nuevas del ajedrez político que el pasado 28 de octubre mutó el gabinete de Sebastián Piñera. Junto a Blumel en la cartera de Interior, el cambio de Nicolás Monckeberg por Zaldívar Larraín en la cartera de Trabajo y Seguridad Social fue uno de los más importantes. Para interpelar e informar su desempeño en el ministerio ayer la oposición la llevó al banquillo en medio de una tensa Cámara de Diputados.
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Haciendo uso del artículo 52 de la Constitución chilena, Zaldívar fue la primera de cuatro interpeladas que tendrá el oficialismo en menos de una semana. El objetivo sería que la ciudadanía obtenga respuesta sobre temas de seguridad social, pobreza, extrema pobreza y especialmente una de las mayores demandas previo y post el estallido social: las AFP y el horario laboral.
Si bien Zaldívar no pudo responder sobre la insistente pregunta del diputado Marcelo Díaz (PS), encargado de la interpelación, sobre si el sistema de AFP ha fracasado, la ministra reconoció que “efectivamente el sistema de AFP no ha cumplido con su rol, pero nosotros no estamos defendiendo un sistema de administrador de fondos, sino la posibilidad de que los trabajadores elijan”. También puso sobre la mesa incorporar «nuevos actores». «Creemos que debe haber una entidad fiscal robusta que administre la tasa de cargo del empleador», aseguró.
Respecto a las altísimas utilidades de las AFP que en noviembre ganaron más de 550 millones de dólares, esta es una «muy buena noticia para los trabajadores porque quiere decir que los fondos rindieron de una manera extraordinaria. Quiere decir que todos ganamos”. “Una mayor utilidad y rentabilidad mejora el ahorro de los trabajadores. Lo que necesitamos es que el ahorro aumente”, complementó la ministra que además se adentró en el aumento de la cotización.
