En octubre de 2019, Marcus Wareing, uno de los chef más afamados del Reino Unido, dueño de estrellas Michelin y rostro del MasterChef UK, dejó su mansión de 7 millones de libras esterlinas ubicada en Londres, para descansar de la capital junto a su familia. La figura de la TV partió a otra de sus propiedades en Kent, sin saber que su casa londinense había sido marcada.
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Puntos naranja en las murallas señalaban que la propiedad estaba en la mira de una banda conocida como «la pandilla de los turistas», compuesta por cuatro chilenos: Danko Carvajal-Donaire, de 20 años; Claudio Donoso, de 20; Nicolás Portilla Astorga, de 27, y Jorge Rojas, de 22.
Una vez que la banda detectó que la mansión estaba sin ocupantes, ingresó y robó joyas, relojes y ropa avaluadas en 33 mil libras esterlinas, o seas, más de 33 millones de pesos.
Entre los objetos sustraídos por los chilenos figuran un par de relojes Omega de Wareing y pulseras, aros y cadenas de oro de su esposa Jane.
Condena
La banda fue detenida a los pocos días del robo y ayer fue condenada por la justicia británica a tres años y cuatro meses de cárcel para cada uno de los acusados.
En su fallo, el juez Jonathan Davies advirtió que «nadie aquí o en el extranjero debe tener la idea que en el Reino Unido la tendrá fácil para venir a delinquir». Y acusó a los chilenos de que «cada uno de ustedes vino a este país con un solo propósito: el crimen».
Guerra a bandas internacionales
Las autoridades del Reino Unido tienen en la mira a este tipo de pandillas internacionales. Su modo de funcionamiento es muy simple: llegan al país, asaltan la mayor cantidad de casas y en menos de una semana, escapan del Reino Unido.
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Según la policía se trata de grupos que son coordinados por mafiosos que los reclutan, pagan sus gastos, los llevan y sacan del país y se encargan de «reducir» el botín. De hecho, de los robado por los cuatro chilenos al afamado chef, solo apareció una joya.
Como antecedentes, las autoridades hablan de un capo colombiano que vivía en el Reino Unido y en 2015 planeó y coordinó 800 robos a propiedades.
Las estimaciones de la policía cifra en al menos 100 delincuentes sudamericanos que ingresan por año al Reino Unido solo a asaltar casas.