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El show de medio tiempo del pasado «Super Bowl 54», protagonizado por Jennifer López y Shakira, provocó millones de reacciones en todo el mundo. Y no todas positivas.
Un activista cristiano estadounidense, Dave Daubenmire, aseguró a través de su programa de radio online y sus redes sociales que lo que vio fue «un ejemplo de discriminación cristiana, más propio de un club de striptease que de un partido de fútbol«, que colocó su alma «en peligro de fuego infernal» por el simple hecho de ver a las cantantes, y que no se avisó a los padres sobre el tenor del show para que «protegieran» a sus hijos menores de edad.
Por eso, y para evitar que dichas escenas se sigan repitiendo en el futuro, Daubenmire afirmó que demandará a la NFL, a Pepsi como patrocinador oficial del evento y a su compañía de cable por 867 trillones de dólares por el delito de «complacer a la pornografía» y canalizarla hacia su casa. Es más, denunció que tener esas imágenes en su televisor «forzaba a agarrarse la entrepierna».
Por ello anunció que se encuentra en búsqueda de un abogado para iniciar su demanda, aunque tiene claro que «tal vez esa no sea la acusación correcta, no soy un abogado«.
