El gobierno de Arabia Saudita decretó la prohibición a todos sus ciudadanos para realizar el «Hajj», o peregrinación anual al santuario de la Meca, debido a la entrada al país del coronavirus.
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La semana pasada, el reino asiático ya había prohibido la entrada a peregrinos extranjeros a los lugares más santos del Islam, La Meca y Medina.
El viceministro de Salud saudí, Abdel-Fattah Mashat, dijo que los grupos que intenten visitar La Meca desde otros lugares tendrán prohibido realizar un peregrinaje conocido como «umrah», que pueden realizar los creyentes musulmanes en cualquier época del año, y que tradicionalmente se hace en grandes grupos. La ciudad, en tanto, puede ser visitada por particulares y familias de nacionalidad saudita.
En tanto, Irán canceló las usuales plegarias del viernes en todas sus capitales provinciales. Se trata de la principal jornada de oración islámica, y ya estaban prohibidas en la capital Teherán y en otras ciudades.
El portavoz del Ministerio de Salud iraní, Kianoush Jahanpour, anunció que el brote ya ha dejado 92 muertos sobre un total de 2.292 casos confirmados.
