Fue en octubre de 2017, pero la información recién se dio a conocer esta semana a través de documentos judiciales. Según un reporte de New York Times replicado en medios internacionales, Harvey Weinstein envió un correo diciendo que «alguien debería matar a Jennifer Aniston». La razón para ello es que un año antes, la actriz que saltó a la fama mundial con «Friends» habría dado a conocer que fue víctima de abuso de poder por parte del otrora poderoso productor.
PUBLICIDAD
Tras ser encontrado culpable de abuso sexual el 24 de febrero, Weinstein enfrenta una posible condena de 29 años de cárcel. Sus abogados solicitan piedad y piden que solo se le encierre durante 5 años.
Te puede interesar
Los hechos ocurrieron cuando la representante de Weinstein Sallie, le avisó que al productor que la revista Enquirer iba a publicar una historia que narraba que Aniston también había sido víctima de Weinstein. En la respuesta con fecha 31 de octubre de 2017 el hoy caído productor iba sólo una frase: «Alguien debería matar a Jennifer Aniston».
Eb su texto, Enquirer afirmaba que Aniston había dicho a una amiga que el productor le había tocado el trasero varias veces aprovechando que estuvieron juntos durante eventos de la película «Derailed» (2005). Además, la actriz contó que «miraba fíjamente su escote».
Los correos revelados son parte de la documentación que maneja Corte Suprema de Manhattan, donde se investigó al Weinstein y se entregará sentencia en los próximos días.
Tras enterarse del correo, el representante de Aniston, Stephen Huvane, dijo que la jamás publicada información de Enquirer era falsa. «Jennifer nunca ha sido acosada ni atacada por Harvey Weinstein», dijo Huvane y aseguro: que el productor «nunca estuvo lo suficientemente cerca de ella para tocarla» y los dos nunca han estado a solas.
Pidiendo ayuda
PUBLICIDAD
Eso no es lo único, pues se supo también que Weinstein solicitó ayuda al entonces alcalde de Nueva York Michael Bloomberg y al fundador de Amazon, Jeff Bezos, además de los CEO de Apple y de la entidad financiera Goldman Sachs, Tim Cook y Lloyd Blankfein, respectivamente.
«Lo único que pido es que me dejen pedir una excedencia e iniciar una terapia intensiva (…) para poder resucitar y tener una segunda oportunidad», decían los mensajes de Weinstein, quien aseguraba: «muchas de las acusaciones son falsas».
