Entre 2006 y 2007, el zaguero Chase Hilgenbrinck vestía la camiseta de Ñublense de Chillán y era uno de los tantos futbolistas extranjeros que encuentran en nuestro fútbol la tierra prometida. Pero el estadounidense tenía otros objetivos muy superiores, superlativamente superiores, como «estar cerca de Dios», según él mismo lo definió cuanto optó por consagrarse al sacerdocio católico en su país.
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Así, el futbolista dio paso al cura que, en medio de la pandemia mundial y justo en el día de su cumpleaños, se dio tiempo para enviar desde Estados Unidos sus deseos y bendiciones a la gente de Chillán, una de las ciudades con mayor número de contagios en la pandemia.
A través de un video dirigido al club Ñublense y la comunidad de Chillán, Chase confesó que «no saben lo que ocurre en mi corazón con un regalo tan importante (el saludo en su cumpleaños). Dios me ha entregado bendiciones y una de ellas es estar en su pueblo y ser aceptado como extranjero en el club», aclaró .
Luego expresó que «ustedes que saben en estos momentos… Estamos pasando algo tan raro, que no podemos estar con vecinos o familiares. Pero la fuerza no tiene que morir. La fuerza existe en la unión espiritual. Sigan con la misma fuerza. Voy a estar con ustedes. Les mando mi bendición de sanidad y de santidad. Le pido a Dios que bendiga a ese pueblo y a Ñublense. ¡Qué viva Chillán! ¡Y qué viva Ñublense».
Junto con sus bendiciones para todos, el sacerdote-futbolista reconoció que «hay algo en Chillán que no he experimentado en otro lado. Es la fuerza de la gente, la fuerza del corazón. La fuerza de la unión, que no es algo físico, si no algo del corazón».
¡Paren todo! Nos acaba de llegar este video desde Estados Unidos 🇺🇸 de alguien que tiene un mensaje para ustedes. De paso, aprovechamos de saludarlo en el día de su cumpleaños 🎉 ¡Felicidades, Chase! pic.twitter.com/9zEvoLejyb
— Deportivo Ñublense (@nublenseSADP) April 3, 2020