Las imágenes de seguridad de un parque empresarial holandés muestran a un hombre con gorra negra vertiendo el contenido de un envase blanco en la base de una torre de telefonía móvil. Mientras el hombre corre de vuelta a su Toyota para huir en medio de la noche, se alzan las llamas.
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Es una escena repetida docenas de veces en las últimas semanas en Europa, donde las autoridades combaten teorías de las conspiración que relacionan las nuevas redes 5G para celulares con la pandemia del coronavirus, e inspiran ataques incendiarios contra las torres de telefonía.
Hace tiempo que circulan teorías de la conspiración y creencias populares sobre la supuesta amenaza de la comunicación inalámbrica, pero la expansión global de un virus al mismo tiempo que varios países desplegaban redes inalámbricas de quinta generación ha dado alas a esas falsas teorías.
Las autoridades europeas y estadounidenses vigilan la situación de cerca, preocupadas porque los ataques puedan socavar las comunicaciones cuando son más necesarias para hacer frente a la pandemia.
«Estoy absolutamente indignado, absolutamente asqueado de que la gente actúe contra la misma infraestructura que necesitamos para responder a esta emergencia sanitaria», dijo a principios de abril Stephen Powis, director médico del Servicio Nacional de Salud en Inglaterra.
En Gran Bretaña se han reportado este mes 50 incendios contra torres de celulares y otro equipamiento, que han llevado a tres detenciones. También hubo 80 agresiones contra ingenieros de telecomunicaciones cuando trabajaban, según el grupo del sector de telecomunicaciones Mobile UK, lo que convierte al país en el núcleo de los ataques. A menudo, se difunden videos y fotos de los ataques con comentarios falsos sobre el COVID-19, la enfermedad respiratoria que produce el coronavirus. Se han registrado 16 incendios de torres en Holanda, así como casos en Irlanda, Chipre y Bélgica.
La tendencia recibió atención especial en Gran Bretaña cuando se atacó una torre que gestionaba tráfico de voz y datos en un hospital de campaña en Birmingham para pacientes de coronavirus.
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«Ya es bastante angustioso que las familias no puedan estar junto al lecho de seres queridos que están enfermos de gravedad», escribió en LinkedIn Nick Jeffery, director general de la operadora móvil Vodafone UK. «Es aún más perturbador que incluso el pequeño consuelo de una llamada de video o teléfono puede verse negado ahora por las acciones egoístas de unos pocos teóricos de la conspiración engañados».
Los mensajes falsos que vinculan el 5G y el coronavirus se han compartido cientos de miles de veces en medios sociales. Pueden variar desde afirmaciones sobre que el virus es una tapadera para el despliegue del 5G a los que afirman que las nuevas instalaciones de telefonía han provocado el virus.
No hay pruebas de que las comunicaciones inalámbricas, ya sean 5G o de versiones anteriores, causen daños al sistema inmunológico, dijo Myrtill Simko, director científico de SciProof International en Suecia, que ha investigado el asunto durante décadas.
La actual oleada de teorías se remonta a enero, cuando un médico belga sugirió que había una conexión con el covid-19. Antes circulaban otras versiones, la mayoría afirmando que la radiación de los celulares provocaba cáncer. Incluso ahora que la gran mayoría de los adultos emplea dispositivos móviles a diario, el Instituto Nacional del Cáncer no ha detectado un aumento de los tumores cerebrales.
Las teorías ganaron impulso en 2019 al aparecer en medios estatales rusos, lo que ayudó a llevarlas a la conversación informal en Estados Unidos, según expertos en desinformación.
También se han visto impulsadas por famosos como el actor Woody Harrelson, que compartió un video afirmando que la gente en China estaba derribando una torre 5G. En realidad era una «farola inteligente» de Hong Kong, derribada en agosto por manifestantes prodemocracia por temor al sistema de vigilancia chino. El presentador británico Eamonn Holmes dio credibilidad a las teorías en un programa de conversación, lo que le valió un reproche de las autoridades reguladoras.
«Quiero ser muy claro», dijo el viernes el portavoz de la Comisión Europea, Johannes Bahrke, mientras subía la cifra de incendios. «No hay correlación geográfica ni de ningún tipo entre el despliegue del 5G y el brote del virus».