Los datos sobre hospitalizaciones y urgencias que recientemente liberó el Minsal dejaron en evidencia un hecho a todas luces contraintuitivo: en plena crisis sanitaria por el covid-19, las urgencias por cuadros respiratorios se fueron a pique.
PUBLICIDAD
La semana recién pasada contabilizó un total de 13.111 urgencias respiratorias en la red pública de salud. Pero, en el mismo período de 2019, la cifra era de 93.319 ¿Por qué la diferencia es tan grande? Para la directora del magister en salud pública de la U. Mayor, Lorena Hoffmeister, el resultado era “bastante esperable”, y se refleja en todas las consultas de urgencias.
Que el miedo al contagio de coronavirus esté haciendo que personas con cuadros respiratorios no vayan a urgencias, es una posibilidad, dice la doctora. Sin embargo, indica que la respuesta más convincente se debe a la drástica baja por parte de los grupos menores de 15 años. “Si uno analiza la caída de la urgencia en los menores de un año, ha bajado un 58%. De 1 a 4 años, un 61% y en los niños de 5 a 14 años, un 57%”, detalla.
Una posibilidad es que los chilenos estén prescindiendo de los centros de salud ante cuadros no urgentes. De hecho, la drástica baja en niños bien puede deberse al menor roce producto de no ir al colegio. A eso se suma que, si bien todos los tramos etarios disminuyeron las urgencias, el tramo económicamente productivo lo hizo en menor medida.
Para la experta, estos datos hacen aún más importante la “búsqueda activa de casos positivos por covid-19, pero no necesariamente desde las urgencias hospitalarias, sino que a través de medios que no impliquen ir a un hospital”.
Un efecto colateral positivo de la crisis es que han bajado un 41% las urgencias por accidentes de tránsito, pero Hoffmeister dice que se debe poner ojo en la baja de urgencias por hipertensión o diabetes, cuestión que podría hablar de descompensaciones futuras para quienes se descuidan por evitar contagios.
