En tiempos de pandemia de coronavirus es muy complejo, burocrático y peligroso viajar. Pero esto no le importó a Lea Torres (42), quien viajó desde Concepción a Israel, para donarle la médula ósea a su hermana Elisheva Katz (64).
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Lea llegó desde Concepción tras enterarse de que su hermana mayor, paciente oncológica, necesitaba un trasplante de médula ósea de manera urgente y que no se había conseguido dentro de Israel un donante con el tipo de sangre adecuado para Elisheva.
El cierre de fronteras aéreas debido al coronavirus fue un obstáculo importante y Lea debió sortearlo obteniendo permisos especiales del Ministerio de Relaciones Exteriores para encarar un largo viaje de 42 horas: desde Chile viajó a Miami, desde allí a Nueva York, y en Francia realizó una última escala antes de aterrizar en Israel.
De acuerdo a los detalles entregados por el medio israelí Ynetespanol, Lea, quien como cualquier persona que ingresa a Israel deberá someterse a dos semanas de aislamiento domiciliario, contó en el aeropuerto Ben Gurion que «en cuanto me enteré de la condición de Elisheva, dejé a mi esposo e hijos en Chile y me vine a salvar a mi hermana mayor. A pesar de la distancia, nuestra conexión es fuerte y es un privilegio estar acá”.