Una niña de 4 meses llegó a urgencias del Royal Cornwall Hospital, Reino Unido. La pequeña ya llevaba varias semanas internada en el Hospital de Niños en Bristol, pero la gravedad de su situación obligó a un traslado de urgencia.
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La niña era completamente sana hasta que se quedó sola al cuidado de su padre, un joven de 24 años que no ha sido identificado por la policía, y quien en un ataque de ira sacudió tan fuerte a la pequeña que le desprendió las retinas y le provocó múltiples hemorragias cerebrales.
«La combinación de lesiones era indicativa de un traumatismo craneal abusivo con sacudir el mecanismo más probable», aseguró Michael Brown, de la Truro Crown Cort, que lleva el caso, según The Sun.
«Es un milagro que no haya muerto, pero ahora está ciega y tiene parálisis cerebral, todo porque la sacudió», dijo el juez que aprobó prisión de 32 meses el joven.
