A medida que la crisis sanitara se agudiza, la telemedicina cobra más sentido en el sector salud. Particularmente en el Hospital del Trabajador Achs, se está llevando a cabo telerehabilitación a aquellos pacientes que sufren de covid-19. A quienes se encuentran en camas críticas y que, en muchos casos, están con compromiso vital.
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“Gracias a la colaboración con País Digital y Entel, hoy los pacientes covid-19 pueden mantener contacto con sus familias y además desarrollar actividades de rehabilitación (fonoaudiología y terapia ocupacional) a través de dispositivos móviles (celular y tablet)”, afirmó Juan Carlos Vélez, jefe de Rehabilitación del Hospital del Trabajador Achs. «Creemos que mantener la comunicación con sus seres queridos y sostener sus terapias físicas puede marcar una sustancial diferencia en momentos tan complicados como los que están viviendo», añadió.
Tendencia en aumento
En nuestro país la telemedicina se incrementó desde hace un mes, desde que la Superintendencia de Salud autorizó a los médicos para atender a sus pacientes a través de sistemas de videoconferencia. El objetivo es mantener la continuidad de la atención, evitando acudir a un recinto de salud y previniendo el riesgo de contagio por covid-19.
La telemedicina, así como el teletrabajo y la teleeducación, son las aplicaciones más utilizadas durante la pandemia y su demanda crece día a día. De acuerdo con estudios de fabricantes como Nokia, los servicios digitales se elevan a tasas del 70%, y el uso de aplicaciones de videoconferencia se incrementa por sobre el 300%.
Con la llegada del 5G este 2020, la telemedicina podrá avanzar hacia procedimientos médicos más masivos y complejos, los cuales comenzarán a masificarse. Con ello, nos referimos a cirugías que empleen por ejemplo realidad virtual, las cuales ya son una realidad en el Hospital del Trabajador Achs.
Telemedicina y terapia física
El Centro Médico del Hospital del Trabajador también ofrece atención de terapia física a distancia a pacientes no covid, con el fin de evitar que vean interrumpidos sus programas de rehabilitación en tiempos de pandemia. Primero, se realiza una sesión presencial donde se consensuan y enseñan los ejercicios en conjunto con el paciente, tomando en cuenta los implementos o la infraestructura del hogar del paciente. Con aquello, se crea una pauta de ejercicios en PDF. Se envía la pauta a través de correo o WhatsApp. Luego se realiza control telefónico 2 veces a la semana.
“Esto trae consigo grandes beneficios para el paciente, entre los que es posible mencionar, por ejemplo, que posibilita diagnósticos y tratamientos rápidos y oportunos; la continuidad de tratamientos para pacientes que de lo contrario no podrían recibir atención; además de evitar traslados que podrían significar un contagio por el virus”, afirmó el doctor Vélez.
En Europa
Cabe mencionar que existe experiencia internacional en la materia. En Italia, a raíz de la crisis sanitaria por covid-19, se traspasó toda la atención no urgente a modalidad no presencial (utilizando plataformas ya disponibles para telemedicina, llamados telefónicos o desarrollando nuevas apps). El gobierno en colaboración con la OMS realizó un Fast-Call para el desarrollo e implementación de nuevas alternativas de asistencia remota para pacientes. En España, debido a la crisis sanitaria, restringieron las consultas y cirugías únicamente a aquellas de carácter urgente tales como fracturas y tratamientos post-quirúrgicos Para seguir entregando el servicio a sus pacientes, montaron un servicio de videoconferencias o por vía telefónica.