En las calles de Gran Bretaña se podrían retirar más estatuas de figuras imperialistas, luego del derribo no autorizado de un monumento al comerciante de esclavos Edward Colston en la ciudad de Bristol, dijo el alcalde de Londres el martes.
PUBLICIDAD
Sadiq Khan anunció la formación de una comisión para asegurar que los monumentos de la capital británica reflejan su diversidad. La Comisión para la Diversidad en el Ámbito Público revisará estatuas, murales, arte callejero, nombres de calles y otros monumentos y considerará qué legados deben celebrarse, explicó la oficina del alcalde.
«Es una verdad incómoda que nuestro país y ciudad deben gran parte de su riqueza a su papel en el comercio de esclavos y, aunque esto está reflejado en nuestro ámbito público, la contribución de muchas de nuestras comunidades a la vida en nuestra capital ha sido ignorada deliberadamente», apuntó Khan.
El debate sobre quién debería ser reconocido públicamente se ha reactivado en el país con la retirada del monumento a Colston, un comerciante de esclavos y filántropo del siglo a XVII. Su estatua de bronce fue derribada de su pedestal en Bristol, en el suroeste de Inglaterra, durante una protesta de Black Lives Matter el domingo y fue arrojada al mar en el puerto.
Muchos habitantes de Bristol celebraron la retirada de la estatua, pero el gobierno británico dijo que era un acto de vandalismo y pidió a la policía que procese a los autores.
El primer ministro británico, Boris Johnson, reconoció que era «una fría realidad» que en Gran Bretaña la gente de color experimenta discriminación, y prometió que su gobierno estaba comprometido con la «erradicación de los perjuicios y creación de oportunidades».