El representante de la OMS en Chile, Fernando Leanes, llamó el miércoles al Gobierno a definir rápidamente cómo cuenta a los fallecidos por el nuevo coronavirus en medio de las críticas de las sociedades médicas, porque el método aplicado se aleja de las recomendaciones del organismo.
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Leanes señaló que las dudas deben aclararse para que los esfuerzos del país se concentren en la prevención de los nuevos contagios, que han subido a unos 4.000 por día.
Durante la última semana Chile informó un promedio diario de 87 fallecidos hasta la víspera, cuando la cifra bajó a 19 en un país que tiene más de 148.000 infectados, lo que lo ubica entre las naciones con más contagiados por millón de habitantes. El miércoles se informaron 192 decesos ocurridos en varios días.
Leanes dijo que los cambios metodológicos introducidos los últimos días por el Ministerio de Salud «han generado confusión».
«Puede haber razón (en la cifra), pero tenemos que encontrar la claridad rápidamente», porque de lo contrario, «no estamos hablando de cómo manejarnos, de cómo prevenir los contagios», enfatizó.
El Ministro de Salud, Jaime Mañalich, explicó que el nuevo sistema considera el día del deceso inscrito en el Registro Civil -por lo que la cifra se reduce notoriamente los fines de semana- cruzado con una prueba positiva al virus.
Pero la OMS señala que entre los fallecidos por coronavirus se deben contabilizar a quienes tenían un cuadro clínico compatible sin considerar si se les realizó la prueba.
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Hasta la semana pasada se consideraban los certificados médicos de defunción y la prueba, aunque sus resultados estuvieran pendientes. La información era recogida directamente de los hospitales.
Diego Pardow, presidente de Espacio Público, un centro de estudios independientes, señaló que la nueva metodología genera confusión y no permite hacer comparaciones con las cifras anteriores de decesos. «En este cambio de criterio yo sólo veo problemas, no veo nada positivo».
Por su parte, el doctor Cristóbal Cuadrado, dirigente del Colegio Médico y académico de la Universidad de Chile, destacó que ahora las mediciones se basen en un proceso automatizado pero criticó que «aún no tenemos un criterio que sea concordante con lo que la Organización Mundial de la Salud recomienda».
Agregó que hay personas que fallecen sin tener la prueba hecha o llegan tan graves a los servicios de urgencia que no alcanzan a ser testeadas. «Por lo tanto, seguimos teniendo una subestimación importante (en la cantidad de muertos)… Llamo a la autoridad a de una vez por todas resolver este tema y (que) nos permita tener estadísticas confiables».
El ministro de Ciencias, Andrés Couve, aseguró que «ahora tenemos un sistema mejor». Aunque admitió que hay diferencias con los criterios de la OMS, dijo que «estamos siguiendo criterios que están usando muchos países de la Unión Europea».