La suspensión más prolongada del fútbol inglés desde la Segunda Guerra Mundial llegó a su fin este miércoles, dándole una pizca de alivio a un país privado de su deporte más popular durante la pandemia de coronavirus.
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La Liga Premier, la más rica del mundo, fue suspendida el 13 de marzo, luego que el técnico de Arsenal, Mikel Arteta, diera positivo. El covid-19 ya se había propagado rápidamente desde Italia y España al resto de Europa.
El primer partido en 100 días fue el protagonizado entre Aston Villa, club de la ciudad de Birmingham, y Sheffield United. Se jugó dentro de un estadio Villa Park prácticamente desierto y tras guardar un minuto de silencio por los fallecidos en la pandemia. La presencia de aficionados ha sido prohibida. Al cabo de los 90 minutos, los equipos no se hicieron daño y firmaron un empate sin goles.
Ambos planteles pusieron una rodilla en el piso en homenaje a George Floyd, el afroamericano que falleció cuando un policía blanco le puso una rodilla en el cuello en Minneapolis el mes pasado. Todos los jugadores sustituyeron sus nombres en las camisetas con la frase “Black Lives Matter».
La reanudación en medio de las críticas al gobierno del primer ministro conservador Boris Johnson, primero por esperar hasta el 23 de marzo para ordenar un confinamiento nacional y ahora por aflojar las restricciones prematuramente cuando las cifras de nuevos casos y decesos siguen siendo elevadas. El país ha registrado más de 42.000 fallecimientos relacionados con el virus.
“Me acordé de la noche que empecé a sentir algunos síntomas, lo grave que fue”, dijo Arteta en una conferencia de prensa virtual. “Lo tuvo que reportar porque podía poner en peligro a mucha gente”.
TRIUNFO DEL CITY
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Justamente el Arsenal de Arteta visitaba más tarde al Manchester City en el Etihad Stadium. En la oportunidad, los jugadores de ambos elencos también usaron camisetas con la leyenda “Black Lives Matter» en lugar de sus nombres.
A los 45′ minutos, Raheem Sterling puso en ventaja al elenco de Pep Guardiola. A los 51, Kevin De Bruyne puso el 2-0 de lanzamiento penal, con expulsión de David Luiz incluida.
Finalmente, a los 90, Phil Foden cerró la cuenta para el 3-0 definitivo, que le permite a los «citizens» mantenerse en el segundo lugar de la tabla y asegurando su participación en la Liga de Campeones del próximo año.
El encuentro estuvo suspendido por cerca de ocho minutos por la lesión de Eric García, el canterano nacido en el Barcelona, quien salió en camilla del campo cuando el City ya había agotado todos sus cambios.
En cuanto al arquero chileno Claudio Bravo, no fue citado por Guardiala ni siquiera para la banca de suplentes.
El Liverpool, que lidera el torneo con una sideral ventaja de 22 puntos (82 contra 60) sobre el City y cerca de conquistar su primer título de la liga inglesa en 30 años, regresará el domingo contra Everton, el derbi de Merseyside.
