En la ciudad de Tunja, capital de Boyacá, Colombia, se vivió un insólito hecho que además fue grabado y luego difundido por las redes sociales.
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Se desarrollaba el cortejo fúnebre de un adolescente. El cuerpo iba al cementerio, pero cuando la caravana pasaba al lado de una multicancha, la carroza fúnebre se detuvo y los amigos bajaron al ataúd, que llevaron cerca de uno de los arcos.
Después de eso se produjo algo insólito, porque los cercanos al joven muerto sacaron una pelota, dieron algunos pases e hicieron que anotara su último gol, escena que quedó registrada en un video que luego fue subido a las redes sociales.
La curiosa situación vulneró una serie de normas de salud en medio de la pandemia de coronavirus. De hecho, la policía llegó al lugar para que el cortejo siguiera su camino directo al cementerio.
La funeraria que trasladaba el cuerpo aseguró a los medios locales que no tuvo mayor responsabilidad en los hechos, pues sus conductores fueron agredidos verbalmente e intimidados para detenerse frente a la cancha y bajar el féretro.
El coronel Henry Bello, comandante de la Policía Metropolitana de Tunja, aseguró a Radio Caracol que “la presencia de la Policía ayudó a que se reestableciera el orden y continuar el protocolo respectivo de la inhumación. Estamos ubicando a los padres de familia de los adolescentes para aplicar las medidas administrativas”.
