El conductor del transporte público de la ciudad francesa Bayona, Francia, que fue brutalmente golpeado el fin de semana por exigirle a tres pasajeros que usarán mascarilla, falleció tras pasar una semana con muerte cerebral.
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Así lo comunicó su hija de 18 años Marie Monguillot: ”Decidimos dejarlo ir. Los médicos también lo apoyaron” y luego la esposa del trabajador, Véronique, comunicó en redes sociales, “mi esposo murió a las 5.30 pm, RIP my love”.
Philippe era padre de tres hijas y lo único que hizo fue exigir el cumplimiento de la norma sanitaria de usar cubrebocas en el transporte público, sin embargo, la violencia y el sinrazón pudo más.
Este caso ha generado mucho revuelo político, donde la mayoría de las autoridades solicitan medidas ejemplificadoras.
En el caso ya hay cuatro detenidos, dos de ellos, de 22 y 23 años, fueron los autores materiales de la golpiza y los otros dos están identificados como cómplices.