La historia de Jihad Al-Suwaiti ha conmovido al mundo. El gigantesco amor por su madre no lo detuvo la pandemia ni cuarentenas o las barreras de un hospital cerrado por los casos de Covid. Apenas fue informado que su madre estaba grave en la UCI, el joven palestino trepaba la venta donde estaba su madre para verla y consolarla con una mirada de un amor increíble.
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El muchacho de 30 años se despidió así de la mujer que le dio la vida y que lo crió sola tras la muerte de su padre. Su madre, de 73 años, sufría de leucemia, que se vio agravada por el coronavirrus.
https://twitter.com/CrescentDome/status/1284881328844881920
La imagen de Jihad Al-Suwaiti sentado en la ventana sin despegar la mirada al interior de la habitación donde yacía su madre, ha conmovido al mundo.
La fotografía corresponde al Hospital Hospital Estatal de Hebrón, en Cisjordania y el joven palestino es de la localidad de Beit Awwa.
Jihad Al-Suwaiti, un joven palestino, subió las últimas noches hasta la ventana del hospital donde se encontraba su madre de 73 años. Ella tenía COVID-19. Él no podía visitarla. Sólo quería verla antes de que muriera. Esto sucedió en Beit Awa, en Hebron, al sur de Cisjordania. pic.twitter.com/2iTSeHZZmJ
— Juan Carlos H Blanco (@jchblanco) July 21, 2020
La historia fue difundida por Mohamad Safa, representante de Naciones Unidas en la zona y conocido activista humanitario, quien comentó que Jihad Al-Suwaiti siempre fue muy unido a su madre desde que quedara huérfano de padre, hace 15 años.
