Para el pasado lunes 1 de junio estaba fijada la Cuenta Pública del Presidente Sebastián Piñera, tradición que antes se hacía el 21 de mayo en la sede del Congreso en Valparaíso pero que fue cambiada de fecha en mayo de 2017 mediante una reforma constitucional originada en una moción parlamentaria.
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Esta modificación fue motivada por la dificultades y molestias que provocaba la coincidencia de la cuenta presidencial con el Día de las Glorias Navales, cuando en la ciudad puerto se producían graves protestas.
Desde hace tres años la Cuenta Presidencial es el 1 de junio, día usado para lo mismo en el siglo XIX y en el primer cuarto del siglo XX, y para este año debido a la pandemia de coronavirus hace dos meses el Congreso decidió atrasarla para este viernes 31 de julio.
Y en dos viernes más y debido a las restricciones sanitarias por el covid-19, la ceremonia sólo tendrá un reducido número de treinta invitados, y además la mitad de los parlamentarios asistirá de manera telemática.
En dos días más, y a manera de ensayo, desde las 11 de la mañana se realizará la Cuenta Pública del Congreso pleno en el Salón de Honor del edificio del Poder Legislativo, también con pocos invitados y con muchos congresistas siguiendo la ceremonia vía remota.
Junto al Primer Mandatario estarán presentes los presidentes del Senado, Adriana Muñoz, y de la Cámara de Diputados, Diego Paulsen, quienes darán cuenta de sus respectivas corporaciones, y asimismo asistirán los jefes de comités, además del comité político.
