Luego de diferentes denunciadas recibidas por Denuncia Seguro, la Dirección del Trabajo y la Municipalidad, distintas autoridades procedieron a fiscalizar un supuesto hotel en la comuna de Providencia que estaba funcionando fuera de norma.
PUBLICIDAD
Durante la fiscalización, las autoridades se encontraron con que el hotel no tenía huéspedes registrados, sino que funcionaba como motel, para encuentros casuales de parejas por hora. Se encontraron en el interior seis pasajeros (tres parejas), así como todo tipo de juguetes sexuales. También fueron hallados trabajadores sin permiso y sin contrato de trabajo, quienes además habían pernoctado en el recinto, no contaban con los elementos de protección personal ni registro de asistencia. Una de ellas es extranjera y había ingresado hace dos días a trabajar. El lugar tampoco cumplía las medidas sanitarias para pasajeros ni trabajadores, por lo que la seremi de Salud abrió un sumario sanitario.
El dueño del recinto reclamó que contaba con los permisos al día, pues el alojamiento está tipificado como una actividad esencial y él tenía patente de “hotel sin comida”. Ante su insistencia, la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, indicó que «esto que está registrado como hotel, es en realidad un motel. Y esto está poniendo en riesgo la vida de los trabajadores y de las personas que estaban por hora y sin ser registradas. También encontramos personas trabajando sin contrato, que están siendo obligados a venir, y ningún cumplimiento de medidas sanitarias. Lo que aquí se ha hecho no solamente es incumplir la norma, sino que también la seremi de Salud está en estos momentos levantando un sumario sanitario y la PDI está revisando una vulneración al artículo 318».
A su vez, la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, aclaró que, si bien la patente del establecimiento apuntaba al rubro del hospedaje, el lugar funcionaba en realidad como un “hotel parejero”. “Obviamente que, si la pandemia lo pilla lejos de su lugar de residencia, necesita un lugar para alojar. Pero otra cosa muy distinta es este lugar que funciona para encuentros sexuales fortuitos por hora”, dijo.
El dueño del motel fue detenido por la Policía de Investigaciones, pero en principio no por la transgresión al artículo 318, para lo cual se abrirá un proceso en la Fiscalía, sino porque no portaba un permiso de desplazamiento al momento de llegar al lugar, ubicado en calle Joaquín Díaz Garcés, sino que lo había obtenido solo momentos antes de ser fiscalizado.