Ya antes de comenzar era inédita la séptima Cuenta Pública del Presidente Sebastián Piñera, sumando las cuatro de su primer periodo y las tres de su segunda etapa al frente del país.
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Cambio de fecha, uso de mascarilla y escasos asistentes debido a la pandemia de coronavirus marcaban la previa de la ceremonia efectuada en la sede del Congreso este viernes 31 de julio.
Ya al entrar, la TV mostró que al momento en el que al Presidente le tomaron la temperatura, se dio tiempo para bromear con la persona encargada de ella, diciendo que registraba 36,3 grados.
Fueron en total 88 minutos los que habló el Presidente, sin mascarilla, a contar de las 20:05, luego de que la presidenta del Senado, la parlamentaria PPD Adriana Muñoz, le cediera la palabra en un salón semivacío.
Entre quienes estaban citados para asistir presencialmente al Salón de Honor de la sede del Poder Legislativo estaban los jefes de todas las bancada de la Cámara Baja.
Pero por parte de la oposición no llegaron Camila Vallejo (Partido Comunista), Alexis Sepúlveda (Partido Radical), Claudia Mix (de la bancada mixta, formada por el Partido Liberal, Comunes, Convergencia Social e independientes). En lugar de la última se presentó Gonzalo Winter (CS).
Del lado de los senadores, se ausentaron los del Comité integrado de los Independientes (Carlos Bianchi y Alejandro Guillier) y Alejandro Navarro (Pro).
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Volviendo a Gonzalo Winter, el diputado del distrito 10 se dio maña para desplegar un cartel en medio de la Cuenta Pública, que decía “Quién le disparó a Gustavo Gatica y Fabiola Campillai”, en relación a dos de los casos más mediáticos de personas que quedaron ciegas en medio del estallido social por recibir serias heridas oculares de las que se hace responsables a funcionarios de Carabineros.
Y junto al cacerolazo convocado por redes sociales para la hora de inicio del discurso, al que muchas personas se sumaron a lo largo del país, en Valparaíso grupos de manifestantes se ubicaron en las inmediaciones de la sede del Parlamento, lanzando gritos contra el gobierno, golpeando cacerolas y usando lásers.