El rey emérito Juan Carlos anunció este lunes que se marcha de España, en pleno desarrollo de investigaciones en su contra por delito fiscal y blanqueo de capitales.
PUBLICIDAD
A través de una carta, Juan Carlos I le comunicó a su hijo, Felipe VI, su determinación de abandonar el país.
«Majestad, querido Felipe, con el mismo afán de servicio a España que inspiró mi reinado y ante la repercusión pública que están generando ciertos acontecimientos pasados de mi vida privada, deseo manifestarte mi más absoluta disponibilidad para contribuir a facilitar el ejercicio de tus funciones desde la tranquilidad y el sosiego que requiere tu alta responsabilidad. Mi legado, y mi propia dignidad como persona, así me lo exigen», parte la misiva del ex jefe de Estado.
«Hace un año te expresé mi voluntad y deseo de dejar de desarrollar actividades institucionales. Ahora, guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a los españoles, a sus instituciones y a ti como Rey, te comunico mi meditada decisión de trasladarme en estos momentos fuera de España», prosigue.
Desde la Casa del Rey, a través de un comunicado, Felipe VI expresó lo siguiente ante la decisión de su padre: «El Rey desea remarcar la importancia histórica que representa el reinado de su padre, como legado y obra política e institucional de servicio a España y a la democracia; y al mismo tiempo quiere reafirmar los principios y valores sobre los que esta se asienta, en el marco de nuestra Constitución y del resto del ordenamiento jurídico».
Cabe recordar que desde hace dos meses la Fiscalía del Tribunal Supremo viene investigando a Juan Carlos I por una presunta participación irregular, a través de delito fiscal y blanqueo de capitales, en la construcción del tren de alta velocidad (AVE) que une las ciudades de Medina y La Meca en Arabia Saudita, obra que fue liderada por empresas españolas.