Las autoridades chinas han condenado este miércoles la histórica visita del secretario de Sanidad estadounidense, Alex Azar, a Taiwán y ha alertado de que aquellos que «juegan con fuego se acaban quemando».
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Tras la que ha sido la visita de más alto nivel de un funcionario estadounidense a la isla desde 1979, Pekín ha manifestado su «total oposición a los intercambios diplomáticos entre Taiwán y Estados Unidos». Así, ha insistido en que no existe «pretexto» aceptable para ello.
«En cuestiones referentes a los intereses principales de China, algunas personas no deberían hacerse ilusiones; los que juegan con fuego se acaban quemando», ha aseverado el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Zhao Lijian, en una rueda de prensa.
Así, ha recordado a las autoridades taiwanesas que «no cuenten con el apoyo de terceros países» y que desistan en su intento de lograr la independencia: «es un camino sin salida».
Este miércoles, el secretario del país norteamericano ha finalizado su visita de tres días en la isla, a la que China considera una provincia más bajo su soberanía. Azar, por su parte, ha criticado la gestión de la pandemia de coronavirus por parte de Pekín siguiendo la línea adoptada en términos generales por la Administración de Donald Trump sobre la COVID-19.
«Seguiremos apoyando a Taiwán como amigo y socio en materias de seguridad, salud y economía», ha manifestado durante una rueda de prensa en la que ha criticado la exclusión de Taiwán de la Organización Mundial de la Salud (OMS).