Mongolia y China han presentado de la tristemente célebre peste bubónica o peste negra, la enfermedad que protagonizó la mayor pandemia que recuerde la humanidad, cuando en la Edad Media murieron más de 25 millones de personas solo en Europa. Ante estos casos y en medio de la arremetida del Coronavirus, las autoridades rusas han iniciado un proceso de vacunación masiva de la población.
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La inoculación se centra, precisamente, en las zonas fronterizas con Mongolia. En Rusia existe preocupación por la amplia propagación del patógeno en los distritos de Ovyursky y Mongun-Taiginsky, por lo que se ha activado un gigantesco plan de vacunación de adultos y menores, según informa del The Siberian Times.
Una de las áreas más peligrosas es el distrito de Ovyursky, puntualmente el asentamiento de Khandagayty con una población de más de 3.000 habitantes, en que existe gran preocupación por el estallido de un brote de peste bubónica.
Hasta ahora, el proceso de vacunación ruso lleva más de 2.500 adultos, 623 niños inoculados, todo en la República de Tuva para evitar la propagación de la muerte por pulgas.
Otra causa de propagación de la peste negra es el consumo de carne de marmota, algo que es muy común en toda esta región, ruso-mongola-china.
