Más de un centenar de detenciones realizó este domingo la policía bielorrusa durante los primeros momentos de una nueva manifestación de la oposición para protestar contra la reelección del presidente, Alexander Lukashenko.
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Miles de personas marchaton pese a las prohibiciones oficiales hasta la Plaza de la Independencia, que se encuentra clausurada por la Policía. «Protestamremos en cualquier otro lugar de la ciudad», ha afirmado Maria, una asistente a la marcha de 33 años.
Apenas iniciada la marcha se generaron los primeros arrestos de manifestantes pacíficos, que fueron intruducidos en furgones entre gritos de «¡Vergüenza!» de los asistentes.
El Ministerio del Interior había advertido a los ciudadanos de que no participaran en la protesta no autorizada, y de que podrían responder con violencia a la misma. Además, confirmó que 29 personas fueron detenidas el sábado en todo el país por «delitos administrativos», según recoge la agencia de noticias oficial bielorrusa, Belta.
La prensa bielorrusa también da cuenta de actos «en apoyo a la paz, la seguridad y la tranquilidad» en Minsk, Vitebsk y Gomel, mientras que hubo 24 reuniones no autorizadas. «Se contabilizaron 42 puntos de actividad política en los que participaron más de 8.500 personas», afirmaron los medios. La oposición bielorrusa exige una repetición de los comicios, opción que Lukashenko ha descartado de forma contundente. Además, la oposición denuncia fraude y buena parte de la comunidad internacional no reconoce el resultado.
