El plebiscito del 25 de octubre marcó los actos con que la izquierda conmemoró esta mañana los 47 años del golpe militar. Como es tradicional, las ceremonias se han efectuado en el exterior del Palacio de La Moneda y en el monumento a Salvador Allende en la Plaza de la Constitución.
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Los primeros en llegar al lugar fueron los dirigentes del Partido Comunista. «Hoy es el pueblo el que ha impuesto el plebiscito, los comunistas creemos que hay que darlo todo porque podamos cambiar la constitución e instalar materias en la nueva Constitución que respondan a las demandas del pueblo de Chile», señaló el presidente del PC, Guillermo Teillier.
Senador y pdte. @PSChile, @alvaroelizalde: "Hoy recordamos el ejemplo heroico de Salvador Allende junto al de muchos que dieron su vida ese día y posteriormente por la recuperación de la democracia"@JS_Chile @Brigada_PS#11deSeptiembre#AllendeVive #septiembresellamaallende pic.twitter.com/9xm3qrGDUf
— Senadores PS Chile (@SenadoresPS) September 11, 2020
Posteriormente lo hicieron los partidos Socialista y Por la Democracia, junto a la presidenta de la Fundación Salvador Allende y nieta del ex mandatario, Marcia Tambutti.
«Este octubre de 2020 estamos frente a una oportunidad histórica de construcción colectiva por una sociedad más justa. El plebiscito es una oportunidad de fortalecer y promover la participación social, de aunar voluntades para una sociedad más justa», señaló Tambutti.
A 47 años del golpe de Estado, rendimos homenaje a las víctimas de la dictadura y reivindicamos la lucha por verdad y justicia.
Frente al negacionismo de la derecha, responderemos siempre con la fuerza de la memoria. ¡Ni perdón ni olvido! #ParaQueNuncaMasEnChile. pic.twitter.com/G9K88koP1v
— Partido Comunista de Chile (@PCdeChile) September 11, 2020
Por su parte, el presidente del PS, Álvaro Elizalde, expresó que «todavía son muchas las desigualdades que caracterizan a la sociedad chilena, la dictadura impuso por la fuerza una Constitución a través de un plebiscito fraudulento el año 1980, e impulsó las siete modernizaciones que en rigor fue un modelo tendiente a conculcar los derechos básicos de las personas».
Finalmente, Elizalde llamó a «liberarnos de la camisa de fuerza de la Constitución de la dictadura a través del principio básico de la soberanía popular», votando por el Apruebo y la opción de Convención Constitucional.