Con preocupación reaccionó el Colegio Médico de Iquique ante el ingreso de varios buses con ciudadanos extranjeros a la región de Tarapacá mediante pasos no habilitados. Este sábado arribaron a la zona tres buses con 160 personas de nacionalidad venezolana, para quienes se habría habilitado el Liceo A-7 a fin de cumplir su cuarentena y regularizar los documentos exigidos. Sin embargo, la situación puso en alerta al Colmed, cuyos dirigentes advirtieron que ello puede traer graves consecuencias sanitarias, considerando la pandemia por el covid-19 que aún afecta al país.
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“La falta de control riguroso en nuestra frontera con Bolivia está provocando que este hecho se vuelva una costumbre y que cada vez que ingresen habitantes de manera ilegal nuestra población de Tarapacá corra un riesgo sanitario, al igual que el Hospital de Iquique y la red asistencial durante la pandemia ha estado al borde del colapso”, sostuvieron en un comunicado.
«Creemos que las autoridades deben realizar todas las gestiones necesarias para que los ciudadanos extranjeros que ingresan de manera ilegal al país retornen a sus respectivos países una vez cumplido el plazo de cuarentena preventiva de 14 días», agregan.
La llegada descontrolada de inmigrantes a la zona podría provocar rebrotes y disminuir la opción de pasar a una etapa de desconfinamiento, por lo que el Colmed hizo un llamado a las autoridades a poner “mano dura”. “Hacemos un llamado enérgico al intendente de la región, Miguel Ángel Quezada, y al jefe de la Defensa Nacional de la región, General Guillermo Paiva, a poner mano dura en el control fronterizo. No podemos poner en riesgo nuestra población cada vez que ingresan ciudadanos extranjeros de manera ilegal a Tarapacá”, afirmaron los dirigentes médicos.