Hombres armados emboscaron a fuerzas de seguridad estatales en el noroeste de México, desatando un enfrentamiento que dejó ocho muertos, seis de ellos policías, y otros siete agentes lesionados, informaron las autoridades.
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El gobernador del estado de Durango, José Rosas Aispuro, tuiteó el sábado que la fiscalía del estado investiga los hechos. Tras reunirse con las familias de los agentes fallecidos, prometió que se dará con los responsables.
La emboscada tuvo lugar el jueves en el municipio de El Mezquital, cuando los agentes fueron agredidos por un grupo de armados que esperaban en una curva de la carretera, según los datos ofrecidos por la fiscal del estado, Ruth Medina.
Tres vehículos oficiales quedaron dañados por armas de fuego y seis camionetas de los agresores quedaron abandonadas en el lugar con restos de sangre, por lo que Medina dijo que los agresores probablemente se llevaron a gente herida o muerta que podría haber en el interior.
La sierra de Durango forma parte del llamado “Triángulo Dorado”, un área de cultivo de droga tradicionalmente controlada por el Cártel de Sinaloa.
La fiscal no dijo a qué grupo podrían pertenecer los atacantes, ni dio más detalles sobre los dos civiles muertos. Sólo agregó que al lugar se desplazaron como refuerzo 60 policías estatales, 30 investigadores y elementos de la Guardia Nacional.
