Para todos los niños, y también para muchos adultos, Halloween ya se había convertido en una fiesta esperada, asimilada a nuestra realidad luego de su importación desde Estados Unidos.
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El recorrido de los pequeños por la calles disfrazados al son del consabido «¿Dulce o travesura?» era una costumbre, lo mismo que numerosas fiestas para los más grandes.
Pero la pandemia de coronavirus vino a cambiar lo que ya era una costumbre, por eso las autoridades y especialistas sanitarios hicieron varias recomendaciones para variar la manera de enfrentar este sábado 31 de octubre… la «Noche de Brujas».
La seremi de salud de la Región Metropolitana, Paula Labra, entregó una serie de recomendaciones.
«Los padres y adultos deben ser muy responsable, y evitar los recorridos puerta a puerta, que implican riesgos sanitarios y aglomeraciones. Por eso invitamos a celebrar en casa, o bien efectuar recorridos cortos coordinados con los vecinos».
Paula Labra precisó que «no hay que entregar dulces en platos o bolsas compartidas porque eso implica el contacto de muchas manos. Deben hacerlo en bolsas separadas e higienizadas, y consumirlos en sus respectivos hogares… Tampoco recomendamos que los niños utilicen máscaras en vez de mascarillas, no tienen el mismo efecto. Y hay que estar atentos a que los niños no usen una mascarilla debajo de una máscara, porque eso tiene riesgo de asfixia… Una buena idea es hacer fiestas de disfraces por Zoom, para evitar andar de casa en casa aglomerados».
Y el intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, advirtió que las comunas en Fase 2 de Transición estarán en cuarentena este fin de semana, por lo tanto no podrán celebrar la fiesta de Halloween, lo mismo las que siguen en confinamiento.
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«Este hecho no suspende las reglas sanitarias que nos rigen. Las comunas en fase 3 y 4 tienen más libertad, pero eso al mismo tiempo implica más responsabilidad. Por lo tanto, pido que la gente planifique este Halloween con las debidas medidas sanitarias. El alcohol gel es fundamental, lo mismo que celebrar temprano para evitar el toque de queda que continúa entre las 23 horas y las 05 am».
VOCES DESDE LA SALUD
El médico Eduardo Jerez, pediatra y especialista broncopulmonar de la Clínica RedSalud de Santiago, señaló que «como esta fiesta se ha asentado desde hace tiempo en el país, y de manera especial en los niños, no es cosa de llegar y eliminarla. Los pequeños se han vistos muy comprometidos en lo emocional con la pandemia, por eso hay que festejar de todas formas, para darles un respiro y un momento lúdico. Pero ello debe ser amoldándose a la situación sanitaria».
Por eso el doctor dijo que lo mejor es quedarse en los hogares.
«Yo no recomiendo que se salga a hacer recorridos por las calles. Es mejor hacer algo en la casa, o bien si se vive en un condominio ponerse de acuerdo con los vecinos para planear actividades protegidas, que minimicen los riesgos sanitarios. Los adultos deben ser responsables y crear una ambientación segura. Por ejemplo, es posible hacer juegos dentro de la casa, con los papás y los niños disfrazados».
Eduardo Jerez añadió que «se ha visto que los niños han sido menos afectados por el coronavirus que los mayores en cuanto a la intensidad de los síntomas, o que muchos chicos sean asintomáticos. Pero eso implica que pueden ser más peligrosos a la hora de diseminar el contagio, por eso es mejor tener resguardos».
Otro aporte lo entregó el toxicólogo Fernando Torres, director de la Escuela de Química y Farmacia de la Universidad Andrés Bello, quien detalla cómo elegir los dulces y disfraces para Halloween en el marco de la pandemia.
«No hay que descuidar los ingredientes y composición de productos como golosinas de intensos colores y disfraces de materiales sintéticos que invaden el mercado en esta época. Por eso el llamado es a fijarse en lo que compramos. Por ejemplo, la fabricación de los caramelos, el rotulado de sus envases, la distribución y la venta deben cumplir con requerimientos técnicos para garantizar su calidad y seguridad», explicó.
El toxicólogo agregó que «su composición debe asegurar la inocuidad para el ser humano, por lo tanto, tienen que ser elaborados con materias primas certificadas, autorizadas por la FDA y por la autoridad sanitaria de nuestro país… Hace algunas décadas, los caramelos eran hechos en base a pulpa de frutas, miel y cereales molidos, y eran un alimento que entregaba mucha energía. Hoy, en cambio, para la fabricación de estas golosinas son utilizados otros ingredientes, como azúcar, jarabes de caramelo, colorantes, saborizantes, aceites y ceras».
En el caso de los productos importados, el académico de la UNAB destacó que «quienes los comercialicen en Chile, deben presentar ante la autoridad sanitaria una serie de documentos que respalden la fabricación y aseguren que las golosinas o disfraces no contenga sustancias tóxicas, que su composición sea acorde a lo que declara en la etiqueta del envase, que debe estar escrita en español, y tanto los endulzantes como los colorantes deben ser permitidos por la autoridad sanitaria local.
Sobre los disfraces, precisó que «se debe tener cuidado con las pinturas que se utilizan en la cara y aplican a las telas, ya que si no cuentan con el debido control de calidad y certificación de que no son tóxicos podrían estar contaminadas con plomo u otros metales. La exposición a ciertas dosis de plomo puede afectar el desarrollo neurológico del niño, al igual que el níquel, el cobalto y cromo, generando sensibilización de la piel y dermatitis de contacto».
EL PROBLEMA DENTAL
Otro asunto de preocupación siempre en Halloween es el referido al alto consumo de dulces y golosinas por parte de los niños. Pero al contrario de lo que podría creerse, en los días posteriores no hay una explosión de consultas.
«Las caries se dan por un proceso, por eso es recomendable preocuparse siempre de ellas, y no solo por Halloween. Lo ideal es que los adultos midan la cantidad de golosinas que los niños consuman, pero ahora que se debe estar en casa podemos apelar a la imaginación para, por ejemplo, jugar con las frutas y crear figuras alusivas a la festividad con ellas. Por ejemplo, mandarinas como calabazas o fruta mezcladas en vasos plásticos», señaló el odontólogo Nicolás Díaz, académico de posgrado de la Universidad Mayor.
El dentista dijo que es ideal «no comer dulces o golosinas pegajosas, que se quedan más tiempo en los dientes y acentúan el efecto sobre la dentadura. Tampoco es bueno consumirlos durante todo el día, sino que ojalá durante un tiempo limitado. Una buena medida es cambiarlos por postres en las comidas. Y como siempre recomendamos un buen aseo en la mañana y en la noche, con pastas que contengan flúor. Lavarse los dientes a cada rato tampoco es bueno, pues se ven afectadas las encías».
Desde el programa gubernamental Elige Vivir Sano, enfatizaron en que la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, OMS, es que no más del 10% del requerimiento energético de una persona provenga de azúcares simples, incluyendo el azúcar que aportan las frutas.
Esto quiere decir, por ejemplo, que un niño de 8 años, con peso promedio de 25 kilos y actividad física moderada y un estado nutricional normal, debiera consumir como máximo 170 kcal provenientes de azúcares simples diariamente, equivalentes a 44 gramos de azúcar. Y si el niño come tres frutas al día ya alcanzaría 40 gramos de azúcar.
La secretaria ejecutiva de Elige Vivir Sano, Daniela Godoy, precisó que «el llamado no es a prohibir a los niños y niñas consumir dulces durante estas fiestas, pero sí a limitar el consumo excesivo de galletas, dulces y chocolates, y a complementar con actividades recreativas o bien algunas preparaciones más saludables».