La Justicia de Perú rechazó la demanda legal presentada por la Aociación de Abogados Litigantes de ese país en contra del árbitro FIFA chileno Julio Bascuñán y el crack brasileño Neymar, luego del polémico partido del 13 de octubre por las clasificatorias que el juez nacional dirigió entre las selecciones de Perú y Brasil (2-4).
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En su presentación legal, los abogados sostuvieron que ambos cometieron el delito de falsedad genérica. «Simula falta y se cae intencionalmente», argumentaron en contra del astro del Paris Saint-Germain. Y de Bascuñan acusaron que «alteró la verdad intencionalmente». Solicitaron de dos a cuatro años de cárcel para el referí y hasta amenazaron con pedir su extradición.
El diario limeño Líbero tuvo acceso al pronunciamiento del «Caso N° 468-2020» del Ministerio Público, donde resolvió «declarar no ha lugar a formular denuncia penal contra Neymar Da Silva Santos Júnior, Julio Alberto Bascuñán Gonzáles y contra los que resulten responsables por la presunta comisión del delito contra la Fe Pública en la modalidad de falsedad genérica, en agravio de la afición peruana y sociedad».
Sin embargo, de manera inmediata, la Asociación de Abogados Litigantes del Perú respondió presentando un recurso de queja de derecho contra la Disposición Fiscal de Archivo por el caso de Neymar y Julio Bascuñán.
En todo caso, la prensa peruana interpreta que el fallo significa una derrota definitiva para los abogados que pretendían aplicar la Justicia civil a una situación propia de la actividad futbolística y sus normas regidas por la FIFA..
La declaración del Sindicato de Árbitros
Apenas ocurrido el conflicto, el Sindicato de Arbitros del Fútbol Profesional chileno salió en defensa de su agremiado Julio Bascuñán.
Y luego de conocer el desenlace del caso, el presidente del Sindicato, Johnny Harasic, sostuvo que “con el fallo del Ministerio Público peruano creemos que se ha hecho Justicia no sólo con Julio Bascuñán, sino también con una actividad profesional tan vilipendiada. Un árbitro de fútbol, con todas las dificultades que afronta en su vida profesional -insultos, agresiones, incluso burlas a sus hijos y menoscabo constante-, no puede, además, recibir el castigo de los respetados jueces de la República del Perú. Ellos entendieron muy bien la situación y el desempeño de un árbitro, al ser ellos -guardando las proporciones-, jueces igual que nosotros”.
El dirigente e los árbitros expresó que “quisiera garantizarle a todos nuestros agremiados que este Sindicato jamás los dejará solos ante cualquier situación profesional que esté a su alcance para resolverla». Y Harasic enfatizó que No fue la FIFA, ni la Conmebol, menos la ANFP y ni siquiera la Comisión quien sacó la voz para defender a uno de los suyos. Fuimos nosotros que, sin temor, alzaremos siempre la voz ante un ataque al gremio y sus asociados”.
La denuncia peruana
