En un 11,6% cayeron los morosos en Chile durante el tercer trimestre de este año (julio a septiembre) en comparación con el trimestre anterior (abril a junio), pasando de 4.959.145 a 4.384.502, es decir, 574.643 personas dejaron de integrar los registros, según indica el 30° Informe de Deuda Morosa desarrollado por la Universidad San Sebastián y Equifax.
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Cabe recordar que desde el 26 de agosto entró en vigencia la Ley Nº 21.214, que prohíbe que se informen sobre deudas contraídas para financiar la educación, lo que se plasmó en la disminución de morosos de este trimestre. No obstante, aislando este factor, se sigue registrando una caída de 9,3%.
«Hay varios motivos que explican el descenso de deudores y que no son solo atribuibles al retiro del 10%. Se debe considerar que durante la pandemia de coronavirus han sido tomadas muchas medidas para poder postergar créditos, tanto de parte de los bancos como del Gobierno. Por otra parte, a principios de año subieron los nuevos morosos con montos pequeños, pero luego las personas comenzaron a tomar medidas y se endeudaron menos, y además tomaron mayores resguardos. Hay que agregar el hecho de que es probable que muchos hayan pagado parte de su mora con el primer retiro del 10% de los fondos previsionales, explica Gonzalo Edwards, decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad San Sebastián.
Respecto a los valores, se estima que en el último trimestre el valor de la mora promedio alcanza $1.999.200 a pesos de septiembre de 2020, es decir, 6,3% mayor al valor de septiembre del año pasado. Y esa cifra es al menos superior en un 5,4% con respecto a los valores del trimestre inmediatamente anterior.
El informe expone que, en cuanto a cantidad, el 42% de las personas morosas lo está en el retail y el 27% en la banca. Al medirse la participación en monto, el 59% se concentra en la banca y el 21% en el retail.
En tanto, solo 3,8% corresponde a nuevos morosos, lo que representa apenas 0,7% del alza en el último año. En paralelo, 20,3% son morosos intermitentes y 75,9% corresponden a morosos de todos los períodos anteriores.
Respecto del total de personas morosas en el país, el 4,4% corresponde a extranjeros, los que poseen una mora promedio de $1.813.010. En el desglose por regiones, Antofagasta se ubica en el primer lugar con la mora promedio más alta, hasta 9,5% mayor que en el mismo período del año anterior. Le sigue la Región Metropolitana con un alza del 9,3%, Tarapacá (2,9%) y Atacama (7,0%).
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Por su parte, en el Gran Santiago la mora promedio de Vitacura se mantiene como la más alta, alcanzando $9.918.751. Siguen Providencia ($5.991.983) y Las Condes ($5.692.334). Respecto a la participación de personas morosas por comuna, lidera Puente Alto con 7,7%, seguida de Maipú con 7,2% y Santiago con 6,1%.
Al hacer el análisis de personas morosas según género, se evidencia que 2.148.396 morosos son hombres, con una deuda promedio que subió 7,8% en un año y que alcanza los $2.693.823. Y 2.236.106 son mujeres, las que presentaron un alza en el valor de su deuda de 3,5% en doce meses, llegando a un valor promedio de $1.331.823. Ambos registran su principal deuda morosa en la banca, concentrando el 52% y 60% de la participación por monto de deuda, respectivamente.
Según edades, el segmento entre 30 y 44 años es el que concentra más deudores morosos, correspondiente a 36,7% de la participación; seguidos por el grupo de entre 45 y 59 años, con 29,6%.
Felipe Obal, Contador Público y Auditor, y académico la cátedra Fundamentos de Auditoria de la Universidad Alberto Hurtado, sentencia sobre estas cifras que «con seguridad hay personas que pudieron saldar algunas cuentas al corto plazo con el retiro del 10%, pero hay situaciones en las que se tuvo que incurrir en otros gastos que significaron contraer más deudas, lo que nos llevaría a un aumento en los préstamos y a una posible morosidad. También creció el costo de la vida, debido a durante la pandemia han sido consumidos más alimentos y a que ha habido escasez de algunos productos de prevención sanitaria. Y el alto desempleo obliga a realizar la conocida «bicicleta». Lo que viene con el segundo retiro es una situación que incluso puede ser peor, pues estamos entrando a una época de mucho gasto por las celebraciones y ls vacaciones. Es importante que la gente tome sus resguardos ante un eventual rebrote, y si no estamos siendo precavidos con nuestros recursos es probable que haya un auge la morosidad por el incumplimiento de los pagos».