La Intendencia de Valparaíso anunció la suspensión del show de fuegos artificiales de Año Nuevo en la comuna puerto, Viña del Mar y Concón.
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La medida se tomó tras el aumento de casos positivos de covid-19 en la región en el último Informe Epidemiológico, el que ha demostrado una fuerte alza de contagiados.
«Así como no habrá Festival de Viña como otras actividades, primero está la salud de las personas. Queremos que la gente esté sana y los adultos mayores pasen muchos más años con nosotros», aseguró el intendente Jorge Martínez.
En esa línea, la autoridad regional en compañía de los alcaldes de las tres comunas, indicó que se tomarán todas las medidas de fiscalización para volver lo antes posibles a la Fase 3 de Preparación.
Este lunes, el Ministerio de Salud anunció que Valparaíso, Viña del Mar y Concón retrocederán a Fase 2 de Transición a partir de este miércoles 23 de diciembre a las 5:00 horas.
Autoridades informan sobre nuevas medidas por festividades de fin de año en la región. Revisa aquí 👉🏻[VIVO] https://t.co/yZ8VxFf787 pic.twitter.com/b6w3OMOifH
— Delegación Presidencial Regional Valparaíso (@DPRValparaiso) December 21, 2020
Comerciantes molestos
La decisión de la autoridad generó una serie de reacciones entre los habitantes de la zona, fundamentalmente de las personas ligadas al comerciio. Según consignó radio Cooperativa, varias personas recibieron la noticia con decepción, pues tenían altas expectativas de generar ingresos adicionales en esta fecha.
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Al respecto, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, aseguró que «la gente quería los fuegos artificiales, es una fiesta popular. Es una decisión muy dura y pone un marco de incertidumbre a la jornada turística completa, porque en cualquier momento podríamos cambiar de fase. Hay gente que hizo esfuerzo por invertir. Espero que la estrategia que se vaya a empujar, sea integral».
En tanto, la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, comentó que «lamento esta noticia de la suspensión. Los tres alcaldes ya estábamos preparados y coordinamos, pero ahora tenemos esto. Lamento llevar esta noticia a la comunidad, a los trabajadores, al comercio».
La suspensión del evento, en tanto, puso en la mesa de discusión qué pasará con el contrato que se tenía para la realización del mismo. Hace un tiempo, los mismos alcaldes comentaron que una eventual cancelación supondría el pago de multas, pero en esta ocasión las autoridades aseguran que esto no correspondería, pues la suspensión «no es por un capricho, sino por fuerza mayor», lo que eventualmente les permitiría cancelar sin pagar multas.